Rosario es el corazón de una región que recibió, principalmente, a inmigrantes italianos, quienes fueron protagonistas fundamentales a la hora de darle forma a la ciudad. Entre los hábitos que estos traían se encontraba la tradicional producción y consumo del Gelatto Italiano.
Desde principios del siglo XX el consumo de helado se hace fuerte, llegando a ser la ciudad con mayor consumo per capita de helado de la Argentina así como también la que tiene una mayor cantidad de heladeros artesanales y locales por habitante.
Esto llevó a directivos de la CICHA (Cámara Industrial y comercial del Helado Artesanal) a presentar un proyecto de ley ante el Congreso Nacional para que la ciudad sea declarada Capital Nacional del Helado Artesanal. Es así como el Congreso de la Nación sanciona esta ley y es promulgada mediante el decreto N° 86/99 de fecha 13 de febrero de 1999 designando a Rosario como “Capital Nacional del Helado Artesanal)
En los últimos años el crecimiento de las heladerías estuvo cada vez más en auge,sumando a las tradicionales marcas de Paseo Pellegrini, heladerías más pequeñas o franquicias con sello propio que acaparan la atención no solo de turistas sino se constituye como un paseo obligado en las tardes o como postre obligado para almuerzos familiares .
En el año 2017 y 2018 se realizó con el apoyo del Ente Turístico de Rosario y CICHA la Fiesta del Helado Artesanal, donde más de 20 heladerías de dieron cita en el Parque Nacional a la Bandera con sus stand y vendieron a precios muy accesibles sus clásicos sabores y mostraron sus sabores más raros y exóticos como roquefort, campari, queso y dulce, arroz con leche, snapchat cream, fernet, chocolate colombiano, daiquiri de maracuyá, red bull, y branca-coca.
Al mismo tiempo se eligió una tarde primaveral para que las heladerías abran sus puertas de forma más extensiva: creando la “Noche de las Heladerias”: en las que se pudo ver largas colas de rosarinos comprando a precios de oferta., 1/4; 1/2 y 1 kilo de helado en su local preferido.
Hoy, con su modalidad take away las heladerías suman adeptos, aunque la salida a la heladería para chicos y grandes sigue siendo un paseo casi obligado en la ciudad.