El viejo expreso patagónico La Trochita comenzará a brindar su servicio turístico en la región sur rionegrina a partir del 23 de enero, tras diez meses sin actividad. Funcionará con protocolos adecuados por la pandemia: los pasajeros solo podrán ubicarse en los asientos junto a las ventanillas, deberán usar tapaboca y se les controlará la temperatura al abordar.
El tren trocha angosta partirá de la localidad de Ingeniero Jacobacci, el próximo 23 de enero a las 11 horas, con arribo a Ojos de Agua alrededor de las 13, en un recorrido turístico de 46 kilómetros a un costo de $ 2.800 por pasaje ida y vuelta. En el viaje los pasajeros podrán descender para visitar el pueblo y tendrán la posibilidad de almorzar, antes de emprender el retorno. Según informaron desde la empresa, los servicios de La Trochita programados son para el 23 y 31 de enero; el 6, 13, 20 y 27 de febrero; y el 6, 13 y 20 de marzo.
La locomotora funcionará con protocolos adecuados por la pandemia de coronavirus: los pasajeros solo podrán ubicarse de manera individual junto a las ventanillas, excepto las familias que tendrán acceso al pasaje grupal. Además, se exigirá del uso de tapaboca y el control de temperatura a los viajeros antes de abordar la formación.
“Para nosotros es una muy grata noticia volver a operar La Trochita, porque es una excursión que queremos mucho”, dijo el presidente del Tren Patagónico, Néstor Bruno. Y agregó: “Hay gente de todo el mundo que quiere hacer estos viajes, en trenes a vapor y de trocha angosta, que no existen más. Estamos muy contentos con el regreso”.
Un viaje al pasado
La Trochita es el nombre que adquirió la línea de ferrocarril de más de cien años, que une las provincias de Río Negro y Chubut. La locomotora se convirtió en un atractivo turístico por funcionar sobre un andén de trocha angosta y ser uno de los ferrocarriles más australes del mundo. La fama internacional le llegó a partir de 1978 gracias a la publicación de la novela El Viejo Expreso Patagónico, de Paul Theroux en el que la menciona.
Con respecto a la particularidad de la formación, se destacan los vagones de madera del tren, con algunos asientos de tablas y otros de cuero, todos originales desde su inicio.